FELIZ DÍA MADRES DE LA REGIÓN LIMA PROVINCIAS
Siempre Madre

Amaneces en mi vida cada instante
resplandor es la ternura que estremece,
la sublime sensación de cobijarme
en el seno maternal que nunca muere.
Te presentas en mi delfos sin distancias,
no hay vacíos si tu alma me sostiene
con la cálida sonrisa que en el alba,
acaricia cada instante que amanece.
Eres mami, ese aliento que da vida
hay hechizo en tus palabras cotidianas,
en la mágica ilusión de tu sonrisa
y en la sabia sensatez de tu mirada.
Eres musa delicada entre las rosas,
tan virtuosa te contemplo en los detalles
que las huellas del primor de cada instante,
van dejando en el sendero sus memorias.
Siempre alerta, siempre firme, siempre madre,
elegancia en el andar, fuerte y serena
tu elocuencia resplandece en el donaire
y el lenguaje de tus ojos es luz de estrella.
En el vástago universo te presiento
tan genuina, madre mía y sin descanso,
cuando siento en la tristeza de mi ocaso
que el regazo de tu seno es mi consuelo.
Amaneces siempre tierna en cada beso
suspendido en el exilio que separa
nuestras vidas, más tu amor surca mi cielo,
en el templo maternal de la esperanza.


Amaneces en mi vida cada instante
resplandor es la ternura que estremece,
la sublime sensación de cobijarme
en el seno maternal que nunca muere.
Te presentas en mi delfos sin distancias,
no hay vacíos si tu alma me sostiene
con la cálida sonrisa que en el alba,
acaricia cada instante que amanece.
Eres mami, ese aliento que da vida
hay hechizo en tus palabras cotidianas,
en la mágica ilusión de tu sonrisa
y en la sabia sensatez de tu mirada.
Eres musa delicada entre las rosas,
tan virtuosa te contemplo en los detalles
que las huellas del primor de cada instante,
van dejando en el sendero sus memorias.
Siempre alerta, siempre firme, siempre madre,
elegancia en el andar, fuerte y serena
tu elocuencia resplandece en el donaire
y el lenguaje de tus ojos es luz de estrella.
En el vástago universo te presiento
tan genuina, madre mía y sin descanso,
cuando siento en la tristeza de mi ocaso
que el regazo de tu seno es mi consuelo.
Amaneces siempre tierna en cada beso
suspendido en el exilio que separa
nuestras vidas, más tu amor surca mi cielo,
en el templo maternal de la esperanza.

No hay comentarios:
Publicar un comentario